lunes, 9 de agosto de 2010

Un antes. Un después.


Por las rapeadas y las botellas de whisky en la playa, por las sidras y el melón después de las olas, por las puestas de sol en las tablas, por las guerras y los abrazos, por las sesiones mañana y tarde vuelta y vuelta, por el sabor del chocolate, por el zulo, por su estilo, por la luz de las velas, por una mirada memorable, por las mejores vacaciones de mi vida.

Porque aunque se que no es posible no quiero olvidarlo nunca.

1 viaje,
6 amigos,
1 vida.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si pudiera elegir... me quedaba con tu pelo.. y si no fuera por el tiempo.. con la luz de tu mirada.
Dejandome llevar en la cima de las horas, cuando miro dentro de tu alma y la palma de mis manos tiembla.
En un triste grito de tu piel donde guardo todos mis anhelos, surca nuestro velero.

Si tuviera que elegir, elegiría cualquier otro. Y siempre permanezco a tu lado.
Nado en tu cintura de grises paisajes y me ahogo en tu ombligo. Siempre voy a la deriva cuando tu me marcas el camino.


*** Porq el destino tiene ínfimos caminos, pero todos y cada uno de ellos siempre llevan a la misma meta***